Cómo encender una chimenea de leña
El rendimiento de una chimenea de leña depende en buena medida de cómo se realice con éxito su encendido.
La importancia de encender una chimenea de leña reside en que si se hace correctamente podemos conseguir más pronto que la chimenea caliente la estancia o que consuma el combustible de una forma más eficiente.
En este artículo te explicamos, paso a paso, cómo encender una chimenea de leña o una estufa de leña y los distintos métodos que puedes aprovechar.
Pasos básicos antes de encender la chimenea
Si bien hay muchos métodos con los que conseguir encender la chimenea de manera efectiva, antes de iniciarlos hay que seguir unos pasos básicos:
- Colocar correctamente la leña. La mejor manera es en forma de cabaña para que quede un espacio libre debajo y así se incentive la llama.
- La leña de encendido debe ser de un tamaño mediano, ni demasiado grande porque sería muy costoso encenderla, ni demasiado fina, porque entonces se consumiría antes de tiempo.
- Por último, debemos evitar que la leña esté húmeda. Por un lado si no está seca será muy difícil que se encienda y, además, hará aparecer demasiado humo.
Métodos para encender una chimenea de leña
Según las preferencias o los recursos con los que contemos en cada ocasión, podemos escoger un método u otro para encender la chimenea. A continuación te explicamos los más conocidos:
Encender una chimenea de leña con papel
Con este método cogemos un trozo de papel (el de periódico es el más efectivo) y hacemos una bola como el tamaño de un puño cerrado.
Sin apretarla demasiado para que queden huecos en su interior, encendemos la bola de papel y la colocamos dentro de la chimenea. Recordad que antes hemos mencionado que es preferible dejar un hueco entre la madera colocada en la chimenea.
Conforme detectes que se empieza a encender la chimenea, coloca un nuevo tronco encima del resto que se está consumiendo. Repite este procedimiento lo que sea necesario, hasta que el fuego sea uniforme y constante y pueda mantenerse en el tiempo.
Encender una chimenea de leña con pastillas de encendido
Las pastillas de encendido constituyen una de las formas más rápidas y prácticas de encender una chimenea. Con ellas se evita dedicar excesivo tiempo a este proceso y, además, son muy efectivas.
El método con estos productos es muy sencillo. Únicamente tienes que encender una de las pastillas y colocarla en la chimenea. El fuego se extenderá rápidamente.
La mejor forma de aprovecharlo es encendiendo dos de estas pastillas y colocarlas en el centro de la chimenea para conseguir una correcta propagación del fuego.
Encender una chimenea de leña con corchos
Un método casero para encender una chimenea de leña (aunque también muy efectivo) es utilizar corchos.
Es un material que se enciende con mucha facilidad y que puede servir de catalizador para encender el resto de la madera. Como se hace con las pastillas de encendido, podemos prender el corcho y rápidamente colocarlo en el interior de la chimenea.
Encender una chimenea de leña con cerillas
Si cuentas con leña que prende con rapidez, podemos aprovechar cerillas de palo largo para un encendido sencillo de nuestra chimenea.
Prendemos varias de estas cerillas y las colocamos directamente sobre las ramas para conseguir que enseguida se extienda el fuego por ellas.
Encender una chimenea de leña con gel
En la actualidad también es posible aprovechar productos químicos específicamente fabricados para este cometido.
Uno de los más conocidos es el gel de encendido de chimeneas, que consigue que cuente con fuego de forma inmediata.
Para aprovecharlo, aplica un poco de gel sobre la leñaque hayas utilizado. Acerca con cuidado la llama, dado que prende enseguida.
El fuego se extiende rápidamente por las zonas donde haya gel, por lo que los troncos comenzarán a arder rápidamente.
Este gel de encendido de chimeneas de leña tiene muchas aplicaciones. Una de ellas es utilizarlo sobre una rama, que luego podemos colocar sobre el resto, para conseguir encender de forma más lenta, aunque constante la chimenea.