Cómo conservar el calor en una casa
Para conservar el calor en una casa lo principal es disponer de un buen sistema de calefacción, muy recomendable que sea alimentado por biomasa, ya que el consumo de combustible es más barato y además es la forma más ecológica de generar calor.
Pero no sólo es importante para conservar el calor en una casa, tener una buena estufa, chimenea o caldera, es esencial conocer cómo hacer más eficiente ese calor en nuestro hogar.
Como mantener el calor en casa
Por eso mismo, os damos 8 consejos para mantener ese calorcito en vuestras estancias lo mejor posible:
Decora bien tus paredes
Intenta decorar tus paredes con cuadros, estanterías, o algún otro mueble que permita cubrir el espacio. Además de aportar sensación de hogar acogedor, nos ayudarán a subir los grados de la estancia, ya que las paredes suelen estar por debajo de la temperatura habitual. Por otro lado, si hay algún hueco o grieta, es importante que lo selles para aumentar el calor de una casa. Este tipo de deterioros son los culpables de que perdamos más de un 20% del calor en casa. Por eso es tan necesario que cubramos esas grietas y huecos por las que entra el aire frío en casa. ¿Lo mejor de todo esto? Vas a invertir muy poco dinero en arreglar algo que te está haciendo perder muchísimo más.
Buscar una habitación principal en casa
Es donde más tiempo vamos a estar, por lo que si estás pensando en qué lugar instalar tu estufa de pellets ahí, busca una habitación principal y ese será el sitio perfecto.
Las cortinas/estores son indispensables
Las cortinas/estores actúan como una especie de barrera entre nuestra habitación y el cristal de la ventana, evitando en la medida de lo posible que se escape el calor. ¿Sabías que sólo por las ventanas se escapa más de un 30% del calor de casa? Nuestro consejo es que las cortinas sean de un material aislante que puedan dejar pasar la luz. De nada sirve que coloquemos cortinas gruesas si éstas no nos permiten mantener nuestra estancia iluminada. Lo que nos estamos ahorrando en calefacción, nos lo gastamos en iluminación artificial.
Ventanas dobles
Lo ideal es que las ventanas dobles sean de doble acristalamiento con aislamiento térmico reforzado. Una buena ventana nos puede hacer ahorrar hasta un 70% en calefacción. ¿Un consejo para aislar más? Colocar una barrera de madera o plástico corrugado a modo de cenefa en la parte superior de tu ventana. Si notas que entra aire frío por la ventana, te recomendamos que consultes a un técnico o especialista. A largo plazo, ahorrarás en tu factura de la luz.
Cierra la puerta
Otra cosa que hacemos a veces por inercia es cerrar las puertas. Tener el hábito de cerrar las puertas cada vez que se entra o se sale de una estancia es fundamental para guardar el calor. Además, tu estufa, chimenea o caldera tardará menos en calentar la habitación y más fácilmente se podrá mantener el calor en una casa.
Viste tu suelo con una alfombra
Andar descalzo por casa es un gustazo que, por el frío el resto del año, sólo nos podemos dar en verano. Si mantienes el suelo cálido en casa, esto no tiene por qué ser un problema. Cubre tus pisadas con unos buenos calcetines de lana y viste tu suelo con una alfombra de un tejido similar. Mientras más grande sea la alfombra, menos calor se escapará. Otra opción es añadir varias alfombras a tu habitación para de forma más sencilla mantener el calor en una casa. Te permitirá separar espacios y dar personalidad a la estancia.
Recupera tu bolsa de agua caliente
Ahora que lo vintage está de moda, busca alguna botella o bolsa de agua caliente para casa. Este remedio casero ancestral no ha perdido valor con el paso de los años. Con tan sólo ponerla 10 minutos en tu cama antes de ir a dormir, te mantendrás “calentito” toda la noche. Si para conciliar el sueño, te gusta contemplar las llamas del fuego de tu estufa, recuerda que puedes programar el apagado. Así, con sólo la temperatura de tu botella de agua y el que ha desprendido la estufa podrás conservar el calor en una casa.
Ropas de cama de algodón
Por último y no menos importante, es que compruebes que las ropas de cama sean de algodón. ¿Por qué? Es un material económico y que permite transpirar adecuadamente.